¿Qué es ser gay en África?
Difícil, por supuesto.
¿Qué otra cosa puede ser?
Ser trans, sabiendo a la capucha de niño que usted es diferente. El niño Monica-chica. Curioso, cruel, de los niños compañeros. Que no saben nada, pero que jamás le gustaría ser como tú. O, pasando por la pubertad, y el tiempo de una oleada de hormonas, y descubrir que son diferentes en su objeto de deseo. O, más tarde en la vida, después de haber pasado con éxito el camino convencional, y, al descubrir que lo que no es tan a menudo pisado.
La confusión es personal.
El conocimiento que usted es diferente. El deseo, el impulso para ser más o menos de lo que eres.
¿Te ocultarlo?
¿Qué ocurre si, como un trans en Uganda, nunca puedes ocultarlo?
Y su compañeros de juego, sus compañeros sólo sé que eres gay y diferentes sin tener que preguntar? Cuando los que saben, el mundo más viejo y más sabio, están muy dispuestos a aprovecharse de las emociones que no se puede ocultar, que usted cree que puede, y están escritos en su cara, en su paso, todos por la calle?
Chico-chica, hombre-mujer.
Un hombre que es una mujer, y no puede ser diferente ...
¿Qué es escuchar desdén vertido en ti a todas horas, en todos los segundos, los minutos del día?
Algunos de nosotros ocultar. Con mucho éxito. Nos escondemos en la adolescencia, cuando las hormonas son altos y crecientes, cuando se confunden los pensamientos, y el atractivo de nuestros amigos y compañeros es más importante que cualquier otra cosa. Cuando la única cosa que nunca querría ser, es que la temida palabra, diferente?
Nos escondemos. Y buscar compañeros, del sexo opuesto.
Recibimos niños de temprana, para mostrar, para hacer de nuestro mundo creen que somos diferentes. O podemos correr y esconderse de todo lo que se atrevería nos recuerdan cuán diferentes somos.
Sin embargo, no podemos escondernos de nosotros mismos.
Nuestros médicos frente a todo tipo de problemas de la nuestra y nunca, nunca se atreven a decir que conocemos el problema. Que somos diferentes.
¿Dónde buscar ayuda?
¿El gobierno? Los políticos hacen muchas de capital, nos insulte. Aun cuando saben diferente, incluso cuando saben que todos los que están después de los votos, o la población ocupada con algo que realmente no importa ...
la Iglesia, la Mezquita - que son los peores. Desde los púlpitos, que parecen santos, a pesar de las palabras de odio y veneno que salían de las bocas de los predicadores.
¿Tiene alguien alguna vez pensar en el hecho de que somos seres espirituales?
Definitivamente no es la Iglesia en África. El capital político que debe realizar en voz alta gritando y ahogando cualquier palabra de la razón es demasiado grande para ignorarlo. Y, las Escrituras, las santas palabras escritas hace siglos, se han fijado el cerebro, incluso los no nacidos. Tienen que ser creído. And, they say, stone. Y, dicen, de piedra. Tirar las piedras, hacer que todo el mundo sabe santo y especial que eres. Tirar las piedras.
Cuando los predicadores nos mantienen en el desprecio, dentro y fuera del confesionario - cuando las multitudes se reúnen, y estamos dispuestos a reírse con desprecio, a llorar ya gritar de la sangre, cuando el simple rumor de "matrimonio" sacará a los predicadores de la "Operación Gay"
¿Qué cifra tiene que ver con nosotros?
Una cosa que nos es, capacidad de recuperación.
Estamos gay. Y, durante millones de años, hemos tenido el mismo juicio por el fuego.
Dejamos en el camino. Creemos que podemos cambiar. Nos abrazamos los predicadores de la vergüenza y el odio como lo son nuestros paja en el medio del mar del cambio. La violación nuestras mentes, que destruyen nuestros cuerpos, que la fuerza del odio dentro de sí mismo.
Y todavía sobreviven.
Estamos, resistente. Estamos fuerte.
Oh, dentro de nosotros es la semilla de la rebelión. La lucha que sorprenderá a aquellos de nosotros que no somos lo que somos. La necesidad de estar en contra de la corriente. Forzoso, desafiante, obstinado. Para afirmar que somos, a pesar de la corrupción, los que abierta o encubiertamente cuidar de nosotros, es decir, hechos, y el silencio de la vergüenza.
Pocos entienden el poder de curación de la desesperación, cuando aceptamos lo que somos. Cuando nos ponemos de pie y luchar, y decir, ya es suficiente.
Entonces, ni siquiera los vientos del huracán de genocidio se interpondrá en el camino. No las mentiras que son tan a menudo, tan descaradamente dice de nosotros.
Afirmamos que son mentiras, y vamos a luchar con uñas y dientes, con sangre y agua.
Nuestras armas son pocas y contundentes.
Sin embargo, nuestro activo, la humanidad básica de nuestro ser, que es fuerte y real.
We are, Gay, in Africa. - Estamos, Gay, en África.
We shall overcome. - Venceremos.
GUG
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